Entradas

Mostrando entradas de mayo 8, 2011

La Peligrosa Tentación

Como un inocente necesitado por las ansias de conocer lo desconocido y sin querer que surgiera lo inevitable, fui débil ante su inyección más tentadora.  Nada más saborearte, Cronos me concede su poder más personal para poder alimentar mis memorias de arrepentimientos y diversión . Serán los primeros los que me harán pecar de querer volver a repetirte. Una y otra vez. Pero qué es lo que he hecho. Mi olfato se agudiza. Pera..Bergamota...Naranja y Gálbano.  Mis papilas gustativas saborean Cacao y Cedro.  Mi Corazón siente Jacinto y Peonía. Mi vista es capaz de fotografiar con una precisión perfecta cada instante de felicidad; cada instante en que sus 32 corceles blancos avanzan para hacerse con la victoria entre sus fuertes y tímidas murallas de Pasión e Intelecto. No son Superpoderes. Se puede llegar asentir como que los tienes, pero es solo ficción. Cronos no te presta sus poderes para siempre; Él te abre un camino de Felicidad condenado al Recuerdo.  No es una ventaja. Es una

A mis padres, y a los tuyos

Cuando eres pequeño te da la sensación de vivirlo todo como algo "sin importancia", me refiero a que no tienes que preocuparte por nada...para eso están tus padres…¿no? Ahí están ellos para hacerte la comida, llevarte al cole, llevarte a Karate, cuidarte cuando te pones malito, etc. A la edad de los...vamos a decir 15 o 16 años, te entra la vena rebelde y ansías con ganas poder llegar a ser "mayor" para poder hacer todo lo que tus padres no te dejan hacer y siempre tienes el mismo pensamiento:" Joder…cuando sea mayor voy a irme de casa, lo tengo clarísimo". Cuidado tu, pequeño novato del mundo desconocido en el que vives . No sé si sabes que si no llega a ser por la educación que te han dado tus padres, ya sea de una forma u otra, no habrías llegado a donde estas ahora o no llegarás a donde quieres llegar a estar. Siempre, en algún momento de tu vida, le coges odio a tu padre o a tu madre porque por ejemplo no te dejan salir por las noches y la excusa que