Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2014

La Peligrosa Tentación

Como un inocente necesitado por las ansias de conocer lo desconocido y sin querer que surgiera lo inevitable, fui débil ante su inyección más tentadora.  Nada más saborearte, Cronos me concede su poder más personal para poder alimentar mis memorias de arrepentimientos y diversión . Serán los primeros los que me harán pecar de querer volver a repetirte. Una y otra vez. Pero qué es lo que he hecho. Mi olfato se agudiza. Pera..Bergamota...Naranja y Gálbano.  Mis papilas gustativas saborean Cacao y Cedro.  Mi Corazón siente Jacinto y Peonía. Mi vista es capaz de fotografiar con una precisión perfecta cada instante de felicidad; cada instante en que sus 32 corceles blancos avanzan para hacerse con la victoria entre sus fuertes y tímidas murallas de Pasión e Intelecto. No son Superpoderes. Se puede llegar asentir como que los tienes, pero es solo ficción. Cronos no te presta sus poderes para siempre; Él te abre un camino de Felicidad condenado al Recuerdo.  No es una ventaja. Es una

Querido blog, hoy: "La búsqueda en la fábrica del pensamiento"

Qué bonita es la felicidad. Y qué bonita es cuando sabemos que vamos con ella de la mano. Hay veces que se reprime, pero tarde o temprano volvemos juntos, porque sabemos que nos queremos el uno al otro. Hubo una época en la que ella y yo no nos conocíamos muy bien.  Recuerdo que de pequeño siempre estaba ahí conmigo, pero llegó un momento en el que desapareció y nunca más la volví a ver. Pasaba el tiempo y ella sólo daba rasgos de vida, pero muy tenues. No me sentía bien conmigo mismo. Notaba que me faltaba algo. Es por eso por lo que un día me decidí y fui a buscarla allí donde hiciese falta. Debo decir que es que es bastante inteligente, la verdad. Siempre que sucedía algún acontecimiento en el que yo era el protagonista, el protagonista de mi vida, ella aparecía de entre la penumbra y me sonreía con ilusión y orgullo. Siempre aparecía. No obstante, se volvía a alejar cuando se pensaba que no la quería más conmigo. Normal. Yo, inútil de mí, no le prestaba suficiente atención.